lunes, 29 de julio de 2013

Rosario



La muñequita suele bailar en su caja, alejarme tardes nubladas y caras raras de la memoria. Ella es lo desconocido, es la luna que conoce mi andar por la ciudad. Es el decorado, la base y el frente del teatro que llevo en el alma.




*La foto ha sido tomada de internet.

2 comentarios:

María dijo...

Las cajas de música encierran secretos, algunos se destapan cuando las abres.
Un fuerte abrazo amigo escriba, desde mi cielo.

mauricio gonzález faila dijo...

Destino el nuestro de abrir cajas.
Besos.Gracias por tu lectura y comentario María.

mauric10