Un dia mas en la vida. Salgo de trabajar, y el paisaje es tristísimo: Una ciudad quieta, una plaza llena de policias; esos "apóstoles" de la seguridad que llevan sobre el uniforme azul una chaqueta naranja.Otro disfraz para mantener el orden mientras un ladron roba, mata o viola.Otros de manera elegante se quedan con lo ajeno, o lo muestran descaradamente a sus amistades o en las revistas, el resto sigue la vida normal.Éste ultimo tipo de ladrones es peor que el primero,porque cuando deben administrar cometen actos non santos o se escapan por el techo.Aunque busquen disimularlo se les escapa por los poros, nosotros estamos dormidos, unicamente cuando todo estalla nos escandilazamos y juzgamos lo que ese ladron ha hecho.
Habria tambien que ser capaz de mirar lo que pase enfrente nuestro, incluso un poco más allá tal vez.Claro que en la vorágine cotidiana todo se mezcla, lo malo es bueno y lo bueno es una expresión de deseo nada mas,el dia se eclipsa.
Está tambien el pasado y el presente en monumentos, en los estantes de bibliotecas y mentes; el futuro sigue estando reservado para unos pocos, la mayoria no lo espera porque la urgencia del hambre mata cualquier utopia.Entonces se vuelve necesario pensar éstas cosas,pensar sí,ver los hechos tal cual, desarmar los elementos de los que están hechos, meterse en el barro y relatar lo que se ve.Los sucesos suelen darse repentinamente, fruto del azar o las acciones humanas, por ello con mas fuerza es imprescindible reflexionar.Seguramente no sea tan fugaz lo elaborado, sino que pueda captar y reflejar acontecimientos,ser un instrumento, un medio útil para seguir un norte.
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