viernes, 10 de octubre de 2008

Una tarde en Santiago

Independencia al 4000,la tarde que cae.De a poco las luces artificiales se encienden,timidamente avisan que está llegando la noche;mientras tanto el ruido de autos que pasan,las bicicletas silenciosas llegando del centro,del trabajo.
Mas adelante,la avenida que se entrega como la libertad:Inmensa! y a lo lejos parece devorarse todo lo que por ella circula.Son las seis y treinta y cinco,la brisa comienza a mover a los árboles,todo va tomando una forma distinta,la luz no es tal,otra hora a punto de consumirse en ésta parte de la ciudad.

3 comentarios:

Carola dijo...

HERMOSO ESTE ESCRITO! me imagino hacer ese recorrido tal cual lo describes....
Besos

mauricio gonzález faila dijo...

Gracias Caro,es el recuerdo de una tarde por allí.Un beso.

Mauricio

Anónimo dijo...

Bueno Mauri, segui recorriendo las tardes de Santiago. Esta muy bueno tu blog CIUDAD POEMA, llegue de casualidad (aunque las casualidades no existen, je) mientras leia tus datos personales.