que tienes la mano apoyada en tu cara,
que miras tranquila desde el sofá,
ésta parte del mundo:
una luz que atraviesa la ventana,
y sonríes,
la tierra se estremece,
el verso en algodón se mece,
recuerda que estás,
con el color de Febo en el pelo,
con el corazón en fuego envuelto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario